Fernando Pessoa escribía: Si un espacio plástico traduce las conductas generales y las concepciones matemáticas, físicas, geográficas de una sociedad, es necesario que ese espacio cambie cuando la propia sociedad se transforma lo suficientemente como para que todas las evidencias intelectuales y morales que han hecho transparente, durante un cierto tiempo, una representación del espacio, ya no tengan vigencia”

En el caso de los espacios nº 7(Saló del Tron) y nº 15 (Rotonda) del Palau Reial,  la ornamentación-escenográfica, es a mi modo de ver el primer suceso impactante cuando visualicé los espacios, seguido del revestimiento interior en materiales y colores diversos, las dimensiones de las salas, así como los puntos de luz como lucernarios, lamparas etc.,  todo ello confiriendo un cierto aire de misterio.
Después de varias visitas al Palau Reial y de trabajos previos, llegue a la conclusión que una combinación de ingenuidad, concepto y dibujo era lo que debía poner en práctica, y compartir la misma empatía hacia la arquitectura-ornamento.En cualquier caso, sin olvidar de que existe un reto.
En el trabajo de ambas instalaciones, no establezco formas enfrentadas, sino lineales y de ritmo sintético,
Efectos lumínicos: la utilización del neón permite dibujar en el espacio y sobre la arquitectura,  líneas y curvas de luz, intensidad, color y grosor,  así como la disponibilidad de envolver y reedefinir los espacios.

Saló del Tron: la instalación gira entorno a la arquitectura. Cercana a la parte superior del techo, una línea horizontal continua de luz amarilla se apoyará sobre el ángulo superior de las dos cornisas existentes. Por una cornisa, la luz es continua y por la otra, la linea de neón se prolongará (exenta sin apoyo) frente a los ventanales (cornisa cortada). Otras lineas verticales dibujaran su arco que unirá a ambas visualmente.
Desde los ventanales de la planta superior, se podrá apreciar el juego de las lineas de luz  y la extensión arquitectónica que se dibuja. Por el contrario desde la planta baja, la linea de luz queda escondida por el saliente de la cornisa, solo la apreciación de los reflejos indicarán la linea continua, confiriendo dinamismo.

Rotonda: la disposición de la instalación gira en torno a la lámpara. La propuesta son círculos irregulares suspendidos de luz blanca, rompiendo un orden convencional, los anillos circulares se sitúan repartidos y algunos descentrados respecto al eje de la lámpara, que descienden desde el rosetón arquitectónico donde se suspende la lámpara.